Consumo Responsable
CADA VEZ QUE COMPRAS ALGO PUEDES HACER LA DIFERENCIA
Los patrones de consumo y producción insustentables son la principal causa de la degradación ambiental y de sus consecuencias en el desarrollo humano. Gobierno, empresas e individuos, todos, debemos promover y practicar nuevos estilos de vida y tomar decisiones conscientemente.
Consumo Responsable puede también entenderse como Consumo Sustentable. Este nuevo enfoque acerca del consumo se refiere al uso de productos y servicios para satisfacer necesidades sin que se sobrepase la capacidad del ambiente de absorber contaminantes o de proveer recursos para las presentes y futuras generaciones.
Es necesario que consumamos más eficientemente. Al hacerlo, disminuimos nuestro impacto en el ambiente (huella ecológica) y permitimos que otros aprovechen lo que nosotros no estamos utilizando.
Los ciudadanos debemos concientizarnos acerca del impacto que tiene nuestro estilo de vida y con ello, modificar nuestros patrones de consumo.
Actualmente, los consumidores pueden ser responsables solo hasta cierto punto, porque la realidad es que existen muy pocas opciones que puedan ser adoptadas, es entonces cuando el gobierno y las empresas deben actuar.
Los gobiernos deben…
- Adoptar políticas que promuevan la satisfacción de las necesidades de todas las personas y que al mismo tiempo minimicen la contaminación ambiental y el uso de recursos naturales.
- Regular que los productos y servicios tengan precios acordes con su costo ambiental, es decir, internalizar los costos ambientales basándose en principios como el de “quien contamina paga”.
Las empresas deben…
- Desarrollar productos y servicios considerando su ciclo de vida, que tengan un alto rendimiento y que sean durables, reciclables, reutilizables y no tóxicos.
- Adoptar políticas de responsabilidad con la sociedad y el ambiente. Por ejemplo, el comercio justo y los productos orgánicos.